Enter the Kann es una de esas obras que por lo general no concuerdan con el tipo de cómics que solemos leer habitualmente.
Estamos ante un tebeo realizado al completo por Víctor Puchalski, autor valenciano bastante desconocido, que lleva a cabo con este título su primera historieta larga, después de haber trabajo en varios fanzines donde, además, creó al protagonista del tomo que aquí vamos a analizar. Autsaider Cómics es la encargada de publicar esta obra, que se puso a la venta en 2016, y cuyo principal aliciente fue su magnífica edición con una portada lenticular, al más puro estilo de los cómics superheroicos USA, en la que Kann aparecía lanzando un fuerte puñetazo a la cara del lector.
Argumento
Puchalski lleva a cabo un trabajo bastante ambicioso si tenemos en cuenta que estamos ante su primera obra de mayor extensión. En este cómic el autor valenciano parte de una premisa realmente sencilla, presentándonos a Kann, protagonista absoluto y maestro del kung fu, que quiere acabar con los principales mandamases de esta disciplina de lucha en la que se combinan las artes marciales y la magia negra. Harto de estar sometido a las leyes de su mundo, nuestro guerrero musculado, amoral y salvaje irá a por cada uno de los siete señores, aprovechando no solo su poderío físico sino también su posición de hombre de negocios.
Sobre la obra
A partir de este momento y con un argumento sin complejidad, seremos testigos de la violencia más brutal, escenas escatológicas y sexo.Elementos que se entrelazan y están presentes a lo largo de toda la obra, pero representados de formas muy diferentes, con una originalidad pocas veces vista y una calidad artística impropia de un cómic realizado por un autor con pocos títulos a sus espaldas. Puchalski toma prestado los códigos de la acción de serie b y los utiliza para ofrecernos batallas puramente gráficas, donde se explota al máximo las capacidades narrativas y artísticas de un medio como el cómic. La violencia, en muchos casos, no se presenta al lector de manera figurativa, sino más bien desde diferentes formas simbólicas y gráficas, aprovechando el color o la composición de página.
Influencias
Puchalski utiliza recursos muy distintos, así en algunos capítulos los momentos de lucha se caracterizarán por la geometría de sus formas, tanto de los personajes implicados como de las construcciones, y en otros la acción se mostrará de manera más convencional. De esta forma, se aprecian influencias del underground y de autores como Benjamin Marra. Las referencias del artista valenciano en esta obra son muy numerosas y eso se demuestra en cada capítulo donde este autor hace gala de su versatilidad y capacidad de adaptarse a cualquier estilo, desde el manga hasta el cómic romántico de los años cuarenta y cincuenta.
Aun así, todos los halagos con los que hemos definido este titulo también pueden verse un poco empañados por ciertos errores sobre todo a nivel argumental, afectando especialmente a la construcción del personaje protagonista en el que no se profundiza demasiado y la falta de explicaciones en algunos momentos de la trama, una serie de aspectos que se dejan de lado en favor del apartado artístico, punto fuerte de esta obra.
Conclusiones
En definitiva, con Enter the Kann estamos ante un cómic sorprendente por su arte y por ser el primer trabajo de envergadura de Víctor Puchalski. Una obra que derrocha una calidad gráfica descomunal, reuniendo en un único volumen estilos e influencias muy diferentes, demostrando, además, la valentía del autor valenciano para realizar un título tan ambicioso a nivel gráfico, con viñetas provocativas y muy explicitas no aptas para todos los públicos. Un tebeo, por lo tanto, muy recomendable para aquellos que deseen leer algo diferente, bestia, violento y sin complejidades argumentales. Mención especial merece la edición de Autsaider Cómics, con portada holográfica, uno de los motivos principales por los que me acerqué a este volumen tan peculiar.