Desde hace algo más de año y medio, Ecc ha sacado al mercado la colección de Ken Parker, uno de los mejores westerns europeos, junto con Blueberry y Comanche, pero que en nuestro país hasta ahora no había tenido demasiada difusión y del que había muchísimas historias inéditas.
Pasado este tiempo y una vez leídos 16 números de la serie, podemos asegurar que Ken Parker va más allá del western, y es que además de todos los típicos y tópicos del género, veremos localizaciones y situaciones que en otros westerns no son frecuentes, y me viene a la memoria una aventura en donde el protagonista es embarcado a la fuerza en un barco de balleneros o la continuación de la misma en Alaska, rodeado de esquimales.
Lo cierto es que Ken Parker nos dibuja un escenario muy completo de lo que eran los Estados Unidos una vez pasada la Guerra de Secesión, la crisis económica del año 1873, la doctrina conocida como El Destino Manifiesto y como todo ello desemboca en la fiebre del oro y las Guerras Indias.
Otra característica de la serie de Ken Parker es que vamos a tener personajes históricos, todo ello perfectamente documentado por el guionista Giancarlo Berardi.
Todas estas características las vamos a tener de lleno en el número 16 de la actual serie de ECC, en donde tenemos dos historias:
La primera, Las Colinas Sagradas, y la segunda, La Leyenda del General.
La primera historia nos sirve para ponernos en situación, y es que los indios ven como su territorio sagrado, las Black Hills, empieza a ser invadido por el hombre blanco, el cual utiliza todo tipo de artimañas para caldear el ambiente, enfrentar a las distintas tribus, unas con otras e invadir su territorio con la excusa de la búsqueda del oro, algo en lo que el gobierno ve como una salida para solucionar la crisis económica en la que se encuentra.
Veremos los típicos traficantes de armas, asesinatos de niños con ánimo de provocar a los indios y como suele ser habitual, un Ken Parker en medio de toda esta situación en donde empatiza con el problema indígena y trata de calmar la situación.
En la siguiente aventura, Ken Parker se incorpora tarde a su regimiento, el Séptimo de Caballería, para el cual ha sido reclutado como scout, y aquí es donde vamos a asistir a una de las mejores historias contadas hasta ahora en la serie.
Alejándose de los tópicos que hayamos visto en el cine, los autores nos van a contar un escenario mucho más complejo de lo que podría parecer a simple vista, y es que en la derrota del Séptimo de Caballería se dieron varias circustancias cuando menos extrañas.
En primer lugar, la personalidad del general Custer, un héroe de la Guerra de Secesión que si buceamos en los libros de historia, estuvo casado con una india y podria ser que tuviese un hijo con ella.
El minusvalorar las fuerzas y la coordinación de los sioux hacen que prescinda de unas ametralladoras Gatlin y además un error táctico de uno de sus oficiales deja a Custer en una posición insalvable, rodeado de indios, con todo perdido.
Hablamos de la única derrota del ejército de los Estados Unidos en las llamadas Guerras Indias y de una alianza de tribus que no se sostiene en el tiempo.
¿ Que pinta Ken Parker en todo esto ?
Pues hay que decir que Berardi encaja todas las piezas de una forma magistral, y es que paralelamente que vamos viendo lo que ocurre con Custer y el Séptimo de Caballería, tenemos a un Ken Parker que ha llegado un mes tarde al fuerte, se incorpora con retraso y tiene que alcanzar al ejército, y para eso dedice tomar un barco, en el que van las piezas de artillería, se introducen dos polizones, una india y su hijo, con un pelo sospechosamente rubio y por el camino van a tener una serie de problemas.
Como suele ser habitual en esta colección, tenemos un choque de culturas, de costumbres, vemos que el mundo del hombre blanco avanza de forma inexorable destruyendo la forma de vida de los indios y Ken Parker, que ha vivido entre ellos, tendrá una posición un tanto incómoda.
Resumiendo: Un western de acción y con multitud de detalles históricos un tanto alejado de los convencionalismos del cine.