Encontrarte con lecturas que te sorprenden cuando llevas muchos años leyendo cómics es algo complicado, y se agradece.
Es el caso de Lavennder, del italiano Giacomo Bevilacqua, un cómic autoconclusivo, publicado por Panini Comics dentro de su nueva línea editorial Sergio Bonelli Editore.

No es la primera vez, ni será la última que hagamos alguna reseña de este tipo de títulos, y es que algunos de los componentes del equipo somos muy aficionados al cómic italiano.

Antes de que sigas leyendo, un aviso: es muy difícil reseñar este cómic sin destripar parte de la historia, es más, yo creo que es imposible, asi que voy a tratar de no profundizar demasiado en la historia.

Una joven pareja va a pasar unos días de asueto en una isla paradisiaca, desierta, y con una serie de comodidades proporcionada por una agencia, llamada Lavennder, que también es el nombre del barco que les lleva a la isla, y por si acaso, tienen un teléfono en caso de que ocurra alguna desgracia y tengan que salir corriendo de la isla.

En teoría nada puede salir mal, los dos protagonistas están solos, pueden pescar, hay madera en abundancia para hacer fuego y las únicas amenazas podrían ser algún tiburón en el mar, si cometes la imprudencia de nadar muy lejos de la playa, resbalarte por alguna roca si no miras por donde pones los pies o algún animalito del bosque.

Eso es la teoría, la práctica es otra, y es que da la sensación de que en la isla no están solos, de que son observados, y pronto encontrarán una cabaña en el bosque con claras evidencias de que como mínimo, la isla ha estado habitada no hace mucho.

Y hasta ahí os puedo contar.. por que contar más sería destrozar una serie de sorpresas.

Sin contar más cosas, si quiero dejar una serie de valoraciones personales, y es que independientemente de que estemos ante una historia entretenida, de misterio y magníficamente desarrollada, el ambiente generado por el autor está muy logrado, ahora, una vez leído el final, bajo mi punto de vista, estamos ante un cómic que requiere de una atención por parte del lector y de un esfuerzo por ver, con mucho detenimiento, lo que nos quiere contar el autor.

Al final del cómic hay una serie de extras, no se os ocurra leerlos antes, si lo hacéis es bajo vuestra responsabilidad.
Resumiendo: Una sorpresa muy recomendable para acabar el año.