Phantasmagoria
Reseña Phantasmagoria
Juan Pedro Tocino Castro.
14 noviembre, 2020

El Torres vuelve a su género predilecto con Phantasmagoria, una nueva historia de terror realizada junto a Joe Bocardo, que toma como referencia la miniserie del mismo nombre publicada por la editorial Amigo en USA durante el año 2018. Se trata ni más ni menos que de la última obra de este guionista para Karras, la cual podréis encontrar a la venta en diciembre acompañada de otros cómics muy esperados como la reedición de El Bosque de los Suicidas, también del escritor malagueño.

El catálogo de esta joven editorial sigue ampliándose con tebeos de géneros muy variados y con equipos creativos que siempre ofrecen trabajos interesantes. El caso del título que aquí nos ocupa cumple perfectamente con las cotas de calidad a la que nos tiene acostumbrado Karras y, sobre todo, El Torres. Si solo la portada de esta obra, con su sobriedad y aire tenebroso, os llama la atención, en el interior encontrareis una trama mucho más inquietante y llena de misterio, que mantiene al lector enganchado desde la primera a la última página.

Argumento de Phantasmagoria

La historia nos sitúa en el Londres victoriano del siglo XIX, recordando por la ambientación, el blanco y negro y el tono terrorífico de la obra a From Hell de Alan Moore. A partir de aquí, la trama se centrará, para empezar, en una serie de asesinatos sangrientos ocurridos en la reunión de una logia ocultista. Dicho grupo, al parecer, ha liberado a una entidad proveniente del Otro Lado, que no solo está matando a ciudadanos de la capital británica, sino que también pondrá en peligro el destino de nuestro mundo. Todos estos sucesos serán investigados por los dos protagonistas de este relato, el profesor Hawke y Edwin Drodd, dos enemigos de los que conoceremos su pasado a lo largo de los capítulos.

Phantasmagoria

Sobre la obra

El Torres nos presenta a un elenco de personajes muy variado, en el que cada uno tiene un peso de cierta relevancia a lo largo de la trama. El guionista malagueño consigue que la mayoría de los secundarios adquieran relevancia y nos interesen en mayor o menor medida, algo de agradecer que no siempre ocurre en muchas obras. Por su parte, aunque nos encontramos con un cómic de terror que juega con elementos habituales del género, como pueden ser las posesiones, el gore o la estética macabra, en este caso, todo está enmarcado en un plan mayor de escala planetaria. Aspecto que le otorga un punto original a este título, en el que también interviene un toque épico muy bien integrado.

Otro aspecto a destacar de este tebeo es el ritmo narrativo que emplea El Torres, haciendo que la acción no se detenga en ningún momento, manteniendo al lector expectante constantemente y llegando a un clímax final muy satisfactorio. Por su parte, también es importante dejar claro que, aunque los primeros capítulos se ajustan a una historia de terror tradicional, conforme avanzamos se aprecian ciertos cambios que si pueden distanciarse de las convenciones del género y esto puede no gustar a todo el mundo.

El dibujo de Phantasmagoria

En lo que se refiere al apartado gráfico, el trabajo de Joe Bocardo es excelente en todos los sentidos, consiguiendo con sus lápices y tintas inquietar al lector, que se verá inmediatamente sumergido en la oscuridad y la suciedad de Londres época victoriana. Respecto a la narrativa, pese a que no experimenta en la composición de página, cumple a la perfección con algunas escenas muy impactantes, repletas de sangre y criaturas monstruosas.

Conclusiones

En definitiva, El Torres nos demuestra otra vez su capacidad para realizar historias de horror. Esta vez acompañado de Joe Bocardo, un artista muy completo, cuyo estilo se adecua de manera espectacular a esta obra. Phantasmagoria es un tebeo efectivo e ideal para aquellos que quieran disfrutar con un título de terror a la altura de lo que se espera del guionista de obras como El fantasma de Gaudí. Este cómic estará disponible en el mes de diciembre y ya adelantamos que será una de las novedades más destacadas de los últimos compases del año.