S.H.I.E.L.D Jonathan Hickman
admin
23 octubre, 2020

Hoy vamos a hablar de una de las novedades que Panini nos ha traído en este mes de octubre: S.H.I.E.L.D de Hickman y Weaver.

La editorial Panini ha recopilado en su formato Marvel Omnibus la serie que Marvel Comics comenzó a publicar en el año 2.010 y que finalizó, tras un hiato de casi siete años desde la aparición del cuarto número del segundo volumen. En el año 2.018, los lectores de S.H.I.E.L.D pudieron disfrutar del final de la serie.

S.H.I.E.L.D. – Supreme Headquarters, International Espionage, Law – Enforcement Division o Strategic Hazard Intervention, Espionage and Logistic Directorate, como sería llama posteriormente – es la agencia antiterrorismo, inteligencia y espionaje, creada por Stan Lee y Jack Kirby en el número 135 de Strange Tales allá por el año 1.965 y dirigida por el tuerto de Nick Furia. Los lectores españoles la conoceríamos inicialmente – qué tiempos -, por su traducción literal: E.S.C.U.D.O.

S.H.I.E.L.D

Argumento de SHIELD

¿Qué nos cuentan Hickman y Weaver en esta serie?: los inicios de la organización S.H.I.E.L.D. Hickman, tan caro a las organizaciones secretas, hace un ejercicio de alteración de la continuidad Marvel de S.H.I.E.L.D. modificando o ampliando la información que teníamos de los orígenes de esta agencia de espionaje, convirtiéndolos en un grupo de élite que, a lo largo de la historia de la humanidad, se ha dedicado a proteger a la misma de los ataques exteriores.

De esta manera, veremos a personalidades como Arquímedes, Newton, Leonardo da Vinci y Miguel Ángel  que han pertenecido o pertenecen a la plantilla de S.H.I.E.L.D y digo pertenecen porque precisamente la historia se construirá y desarrollará en torno a estos tres personajes, a los que se unirá Tesla, el hijo de Newton, Howard Stark – el padre de Tony Stark – y Nathaniel Richards – el padre de Mr. Fantástico -, que jugarán, al fin y a la postre, un papel fundamental en la trama.  No deja de ser curiosa la selección de artistas y científicos que Hickman cuya vida ha unido Hickman a la agencia de espionaje: ¿dónde están los filósofos?

La historia, sin embargo, no se limita a contar los orígenes de S.H.I.E.L.D., ni mucho menos. El elemento sustancial de la trama podríamos decir que es la confrontación entre dos ideas, encarnadas en dos personas, Newton y Leonardo da Vinci: el orden y la necesidad, frente al libre albeldrío.  El guión, en este sentido no es original, ¿cuántas veces no hemos visto esta diatriba en los tebeos? Sin embargo, esto no es óbice para que encontremos momentos deliciosos, como la lucha del Coloso de Rodas, remedo de Godzilla pero en piedra, contra un robot alienígena o la explicación del porqué desaparecieron unos días cuando se pasó del calendario juliano al gregoriano.

S.H.I.E.L.D

DESARROLLO DE SHIELD

La historia, en general, está entretenida y bien contada. El problema, a mi modo de ver es doble: uno, ocasionado por la modificación de la continuidad, donde aparecen cosas tan extrañas como el rechazo de un ataque de Galactus a la Tierra antes de su aparición en la serie de los 4 Fantásticos; el segundo, el enorme espacio de tiempo que pasó entre los primeros números y los dos finales. La serie va perdiendo fuelle tras el primer volumen terminando con un final flojo, no malo, pero sí mejorable, algo así como si los autores se hubieran propuesto acabar ya como sea, lo que se había quedado inconcluso durante tanto tiempo.

En el apartado gráfico contamos con los lápices de Dustin Weaver, dibujante que, a mi modo de ver, está a buen nivel, especialmente narrativo cuando tiene que lidiar con una historia que ocurre en tres tiempos a la vez.

CONCLUSIÓN.

En líneas generales, estamos ante un buen tomo, ni mucho menos una obra maestra, pero sí un volumen de aquellos que no nos harán arrepentirnos del dinero gastado.

Marqués Valdegamas.