Spirou y Los Soviets es la última aventura de Spirou publicada en España por la editorial Dibbuks.
Está enmarcada dentro de la línea “Una aventura de Spirou por ..” y en este caso los autores son Fabrice Terrin, que ya guionizó La Tumba de los Champingnac y Fred Neidhart.

Argumento de Spirou y Los Soviets.

La expansión del gen del comunismo es la idea disparatada de los nuevos dirigentes de la Union Sovietica, y para eso necesitan la “ayuda” del Conde de Champicnac.
La desaparición del Conde y la posterior búsqueda de este dará paso a una trepidante aventura por la Union Sovietica de los años 60.
Y es que la ventaja de esta lína editorial de Spirou es que los autores tienen total libertad para enmarcar al personaje en el contexto que les parezca.

Al despertar por la mañana y Spirou y Fantasio ven que la ardilla ha desaparecido, y siguiendo unas huellas, llegan hasta el estudio del Conde de Champignac. Allí encuentran a Spip pero no está el conde.
Fantasio empìeza a rebuscar entre las cosas de este y descubre que los rusos han intentado que el conde colabore con estos en algún proyecto.
Entre las notas descubre que los rusos tienen un rayo llamado G.P.S ( Global Proyect Sputnick) cuyos efectos hacen que la persona irradiada por este se dirija de forma involuntaria hacia el origen del rayo.
Eso es lo que le pasa a la ardila Spip, con lo cual se convierte en una brújula viviente.

A partir de aquí comienza la aventura…Spirou y Fantasio deberán ir a Rusia para averiguar que ha pasado con el Conde.

Homenajes varios.

En la redacción del semanario Dupuis recibirán el visto bueno para su viaje. En un claro homenaje a James Bond, recibirán objetos que les ayudarán en su misión.
Además de una clara alusión a Tintin, ( el título de la historia ya es de por si elocuente) , Gaston el Gafe o Natacha.

Recurriendo a estereotipos.

El humor es humor. Una vez en Rusia veremos bromas recurrentes con clichés que no por estar muy usados perden efectividad.
Desde un científico algo majara, bromas con los gulags, una guía, Natalia, la cual en su juventud fue tratada con hormonas masculinas por que era atleta olímpica, o dirigentes del ejército comunista que viven a todo trapo.
Y es que el periodo elegido por los autores es ideal para una aventura de este tipo.

La varidedad de publicaciones.

En mi caso concreto, mi primera aproximación al personaje fue en la revista Spirou Ardilla, de Sepp Mundis, con aventuras como Z, como Zorglub.
El paso de los años no solo no lo ha desgastado, como puede ocurrir con otros personajes que perduran en el tiempo, si no que ha enriquecido su universo.
A la serie clásica se le une esta que nos ocupa aquí, la cual permite hacer todo tipo de experimentos con el personaje, dándole un aire fresco.
Por otro lado, tenemos también series nueva como Zorglub, del español Jose Luis Munuera o Champignac, además de la serie del Pequeño Spirou.
Todo esto sirve para que el universo de Spirou crezca y a la vez se renueve, dando un aire fresco a los lectores.

Valoración final.

Con Spirou y Los Soviets estamos ante una aventura muy divertida, muy bien dibujada por Fred Neihart, con un dibujo que recuerda al Spirou más clásico.
Respetando la esencia del personaje, con muños guiños que ya hemos comentado, también es adecuada para que se aproxime un lector nuevo.
Se ha hecho esperar su publicación pero ha merecido la pena.

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